Maravillosa sensación cuando uno lee comentarios que superan los artículos comentados. No se podía esperar menos de César Muñoz, nuestro colaborador, integrador social de basta experiencia en tantos campos, en tantos mundos, galaxias y universos. Un placer aleccionador leerle. Aquí os pego su comentario a mi artículo de ayer. Como siempre, gracias por leer.
"Buenas noches Gemma:
Provocadoramente interesante tu escrito. Es lo que he sentido al leerlo.
Siento, pienso y creo (son hechos diferentes que creo tienen relación con tu texto), que hace años que habría que reivindicar el Romanticismo.
Más que el romanticismo: lo que es esencialmente un ser humano, mujer y hombre: deseo, sentimiento.
Nunca sólo y primero, razón, lógica, conocimiento, ideas, palabras...
Es lo que la cultura dominante, muy sutilmente, va transmitiendo mundialmente: seres humanos de cuello hacia arriba.
Un ejemplo evidente de auténtico deseo, sin presencia alguna de razón, lógica, conciencia: una niña o niño, recién nacido.
Es sólo deseo, pulsión...
El filósofo francés, Gilles Deleuze, diferenciaba al ser humano vivo y al vitalista.
Para él, también para mi, un ser humano vivo, es aquél que ama la vida, porque está acostumbrado a vivir...
Un ser humano vitalista, ama la vida, porque está acostumbrado a amar.
Amar una ciudad, un paisaje, una persona, un portal, una pintura, música, calle, esquina, astro...
Cuando dices que crees que es imposible ser genio y persona equilibrada, añadiría un matiz: equilibrada, según lo que la cultura dominante entiende por tal persona: obediente, dependiente, correcta, sumisa...
Gracias por tu provocación".
César Muñoz
No hay comentarios :
Publicar un comentario